¡Te doy la bienvenida al Palabrerío!
Vas a encontrar de todo, locuras, experimentos, uno con un teclado (ese es un pesado) y mucho más.

Sos libre de continuar bajo tu propio riesgo. Yo solo soy un cartel de bienvenida.
No digas que no te avisé.

miércoles, 27 de julio de 2011

Grey and me.

Hay cierta belleza en el gris.
Neutro como es, emocionalmente hablando, es bello.
No tiene ni la alegría del naranja, ni la energía del rojo.
No tiene la vida del verde, ni la fortaleza del marrón.
Es tranquilidad de un domingo a la mañana, es la paz de quién ya ha dicho todo lo que tenía para decir.
No tiene pretensiones, el gris no pretende ser blanco o negro, porque ya es ambos.
Gris no es tristeza de negro, ni alegría de blanco. Es ambos.

Me gusta el gris, lo prefiero, no es nada y es todo.
Gris y yo nos parecemos mucho. Ninguno de los dos demuestra mucho, nos basta con manifestar una parte. No pretendemos ser más de lo que somos, gris no pretende ser blanco y yo no pretendo ser alguien más.
Los dos somos, y nos gusta así.

lunes, 25 de julio de 2011

La vida al borde del salto.

Estamos siempre al borde no? Atrás nuestro está lo que fuimos, y allá abajo está lo que aún no somos. Pero está. No hay otra, hay que saltar. Podés tomar todo el aire que quieras antes del salto, podés retrasar el mismo salto si querés, pero no podés evitar saltar.
Porque allá atrás no se puede volver, es imposible.
Toda mi vida fueron saltos, a cada uno lo superé sin pensarlo casi, sin miedo siquiera. No puedo entender por qué le temo a este, a este borde, al siguiente abismo.
Dame la mano, tengo miedo. Saltemos juntos que tal vez podemos charlar durante la caída.
El reloj sigue su irritante tic-tac. El salto se hace inminente. Casi que tenemos un pie en el aire. El vacío, la negrura, son tentaciones. ¿Cuándo llegará la hora del salto?

Mentí cuando dije que no se puede evitar el salto. Se puede si, pero serías capaz de resistir el no saber qué te espera abajo? No te molestaría saber que te estás perdiendo de algo?

La vida está hecha de saltos y caídas. Fatales caídas? No, pero contundentes. Nosotros sabremos cómo caer...

martes, 12 de julio de 2011

Si volví...¿Quiere decir que me fui?

Es lógico ¿no? Si volvés a un lugar, quiere decir que ANTES te fuiste...
Pero yo nunca me fui realmente de ningún lado, pero como volví entonces?
De dónde me fui? Hacia dónde? Cuándo? Por qué? Preguntas que no tienen respuestas.
Respuestas a preguntas que no existen.
De donde vine y hacia donde voy?
Mi origen, incierto. Mi destino, allá adelante. Mi motor, el viento.
Fluyendo por todos lados llego y me voy.
No llegué desde ningún lado y hacia ninguno voy. Hace falta?
De qué sirve un origen y un destino? Por qué no dejarnos fluír?
Una raíz tal vez, el origen. Una copa, el destino. El tronco, las ramas, el camino.
Una vida un árbol entonces?
Cabeza, es hora de ponernos de acuerdo vos qué decís?