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viernes, 23 de abril de 2010

Fantasma personal

Dedicado a mi asesino.
Me dañaste, me mataste, mataste todo de mi.
No dejaste ni siquiera el recuerdo en las personas que me amaron y a las que amé, el recuerdo de los abrazos que me dieron y que di; nada.
Pero algo te falló, algo hiciste mal, algo dejaste pasar de largo.
No supiste en esa noche fatal que los recuerdon no se deben matar; el recuerdo es el intento de mantener vivo en nuestros corazones a la persona que perdimos, el recuerdo se trata de hacer entender al fantasma del muerto que será recordado y que se puede marchar tranquilo.
Pero no tuviste en cuenta eso...no tuviste piedad, fuiste tan despiadado que borraste la memoria de mis amados, MATASTE su memoria. No sé como lo lograste, pero sé que lo lograste.
Ahora, a causa de tu crimen, del que por supuesto nadie se enteró, estoy un paso adelate tuyo SIEMPRE.
La vez que te tropesaste, mi pié fue el causante, la vez que te enfermaste de una enfermedad desconocida; fui yo quien te administró la droga causante y fui yo quien te curó.
Te estarás preguntando por qué te dejé vivir, es muy fácil; no tuve alternativa.
Te lo voy a poner en términos que entiendas; las reglas del más alla (un lugar acogedor por cierto) dicen que tengo derecho a vengarme, que puedo provocar todo el dolor que quiera, pero que no puedo matar, es frustrante.
Sin embargo, me permite vengar a mis seres queridos...a aquellas personas a las que les quitaste sus recuerdos, tenés que tener muy claro que si no hubieses matado su memoria...no vivirías con el miedo de despertar mañana.

Atte: Tu víctima.

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