¡Te doy la bienvenida al Palabrerío!
Vas a encontrar de todo, locuras, experimentos, uno con un teclado (ese es un pesado) y mucho más.

Sos libre de continuar bajo tu propio riesgo. Yo solo soy un cartel de bienvenida.
No digas que no te avisé.

sábado, 15 de diciembre de 2012

Guardapelo.

Sobre su cuello descansaba una suave cinta blanca, de la cinta colgaba un guardapelo y en el guardapelo una canción, suave y cristalina como la nieve que caía sobre la cabaña. O tal vez la canción era la nieve, y en el guardapelo una foto tras el fino cristal. A su vez, la foto sonaba con la canción de la nieve, la canción de cristal; o tal vez era el momento guardado en la foto, el que sonaba con la canción de cristal.
De todas formas, el punto es que cuando Blanca abrió el guardapelo, foto, momento y melodía salieron y crearon un momento nuevo, tan frágil y precioso como el cristal que los guardaba.

El reloj marcó la una y media de la madrugada. Susurró sus campanadas cristalinas, suaves como la nieve que caía sobre la cabaña.

miércoles, 12 de diciembre de 2012

Reencuentro.


-Vení pasá, cerrá la puerta que entra el frío che. ¿Mate, Té, Café?-silencio- No de eso no tengo.-

-¿En serio nada? Bueno, más para mi...Dah, vení, sentate...pasó mucho tiempo y tengo muchas cosas que contarte -pausa- Si serás desgraciao eh? No...mirá, antes de que digas nada, tá todo bien...me jodió en su momento, pero con el tiempo te entendí, la puerta siempre estuvo abierta para cuando volvieras...sabés que nunca me enojo en serio, salvo aquella vez con el flaco del bar, qué hijo de la gran siete ¿te acordás? Que tiempos flaco...que pendejos que éramos, orgullosos como los mejores...y mirá donde fue a terminar ese orgullo eh? -toma un sorbo de una copa de vino, váyase a saber de dónde la sacó, tose-

-Lo que quiero que entiendas, es que no supe cuándo o como dar marcha atrás flaco...dije cosas fuertes, vos también...los dos fuimos unos boludos, vos tampoco te supiste quedar para re-hablar las cosas. Ojo! No te recrimino nada...tuviste tus razones supongo, y son tan válidas como cualquiera, pero ponete en mis zapatos...bah sandalias...cuando te fuiste, de pronto hubo una tremenda casa que  tuve que cuidar yo solo, que pagar yo solo...¿me entendés? ¿Te acordás que jodido fue cuando El Rube se las tomó? Pero entonces fuimos vos, tu mujer y yo, y maso que la remamos...pero te fuiste vos y quedé yo solo como el único boludo para pagar los platos rotos. No te voy mentir...se me complicó, los dos trabajos y la puta facultad...la casa se me hizo grande y la guita se me iba en idioteces para mantener una casa de uno...no me quedó otra que vender y mudarme al centro...la verdad que me arrepiento, hubiera sido un buen lugar para los chicos...todo ese parque. ¿Te acordás de la choza entre los pinos? Qué lo tiró...que manera de pasar el tiempo ahí arriba, y los viejos llamando con la cornetita esa cuando era la hora de la cena. Que tiempos flaco, todo era tan simple-

-Me pregunto que será de tu mujer, ¿debe estar en sus cuarenta-y-tantos no? Fue muy fuerte verla cuando te fuiste, estaba destrozada. Ella también se fue, creo que a la semana o semana y media después de vos...no me di cuenta, estaba muy en pedo. No me enorgullezco para nada, pero qué se yo...cada uno tiene sus formas de manejar estos asuntos; cada loco con su locura no?-

-Yo también me casé, no sé si viste a mi mujer por ahí en el jardín...tiene unas flores hermosas viste? La flaca tiene una mano para el jardín...dice que se le pegó de la suegra. Y creo que hoy a eso de las siete viene mi hijo...puta madre como crecen los chicos eh? Se quiere casar en el verano, pero no me acuerdo el nombre de la piba...Sandra...Sofía? Ma' qué...empieza con S. Pasó toda una vida no flaco? ¿Cuánto hace? ¿Veinte o treinta? Fue hace tanto querido...pero el pasado pisado no? Lo importante ahora es que volviste! No puedo esperar a presentar al tío y al tío-abuelo! Sos tío abuelo, ¿te das cuenta?

Desde la cocina, un gurí de más o menos cinco- Abue ¿con quién habla el Abuelo?


jueves, 29 de noviembre de 2012

Hija del temblor.

Nació en algún punto del inmenso océano, hija única de un potente temblor en lo profundo. Segundos de nacida tenía y ya echó a correr, con resuelta locura hacia la lejana costa, aunque ella no lo sabía aún.

En su camino, creció, cambió sus colores de un suave gris a un profundo azul-verdoso; se dio cuenta de su poder y lo puso a prueba, se desarmó contra el costado de algún bote ocasional y se volvió a armar. Miles de diferentes criaturas la acompañaron durante trechos de su alocada carrera, a veces compartiendo su juego, otras luchando contra ella; ella casi siempre les ganó...sintió su inmensidad y se sintió invencible, poderosa y temeraria. Ella seguía sin saber, pero la costa se acercaba.

La alarma sonó en la costa, en las calles, en todos lados. La gente, se amontonó en las calles, huyendo hacia donde los cerros prometían refugio, llevando consigo sus amados y un poco menos que lo esencial, estaban acostumbrados ya. La noche los acompañó esperando, llorando una suave lluvia mientras la veía acercarse. La gente esperaba en silencio, con paciencia ganada por años de lo mismo; la oyeron llegar, luego la vieron, inmensa e imparable. Muchos cayeron de rodillas, llorando junto a la mañana, otros simplemente agacharon la cabeza en señal de respeto y rendición.
La mañana la despertó, y mientras abría los ojos vio la costa, los edificios en la calle que rodeaba la playa, altos y encandilantes, le gustó la vista y se acercó, aún sin saber.

sábado, 24 de noviembre de 2012

Blanca

Le gusta el mar, es su escondite preferido. Le gusta oír la sinfonía conjunta de olas y espuma, el eterno chapotear contra el acantilado.
Recorre las desiertas playas con simpleza, con los pies descalzos sobre la arena, con el pelo "azul-ola" suelto al viento, con su sonrisa pintando anocheceres.

Ella es Blanca, pero no de ese blanco insulso y aburrido, sino de ese blanco que tiene algo que decir, ese blanco que pinta una incógnita en el aire y una sonrisa en mi cara.

Blanca tiene un poco de mar dentro de sí; tiene ese ritmo particular cuando se mueve, ese ímpetu y esa determinación que es tan propia del mar. Pero cuando canta...cuando canta, el mar en sí toma su voz, y  la transforma; Blanca es el mar mismo, es la voz de las olas, el canto de la espuma. La noche del mar le pertenece; le pertenecen sus colores, sus aromas, su tiempo mismo.

Me gusta visitarla en su escondite preferido, mimetizar mi tímida voz con la suya mientras escuchamos a las olas cantar. A la noche, cuando el tiempo se detiene, nos sentamos al borde de su acantilado y compartimos brownies; todo transcurre con simpleza, con los pies descalzos sobre la arena.

sábado, 17 de noviembre de 2012

Mediodía.

Hacía frío, pero salieron igual, necesitaban el aire y el espacio para revisar los últimos eventos.
Su llegada, un momento de reconocimiento en la puerta, el beso tímido, el beso no tan tímido, el beso no tímido en absoluto; el bolso en la escalera, el bolso en el suelo, Ella preparando el café.
Ella se rió, con esa risa fácil suya, y le preguntó donde se había golpeado "evidentemente en la cabeza, no me acordaba" dijo él, riéndose también.

El café y la mañana pasaron tranquilos sin apuro, después de todo, solo eran horas, horas contra los meses que ya habían pasado, un sorbo de café contra la eternidad. El mediodía llegó pidiendo permiso, ni el se atrevía a interrumpir ese momento...pero eventualmente llegó y ellos se fueron a caminar.

Un otoño-casi-invierno pintaba el paisaje, estaba frío, pero salieron igual.

domingo, 11 de noviembre de 2012

Mañana AM

07:30 AM.

Suena el despertador, la mano perezosa busca a tientas y haciendo muestra de una increíble precisión, lo apaga de un solo golpe. Con los ojos aún cerrados se viste, con los ojos aún cerrados se tropieza con la silla. Mal comienzo...aún así, no abre los ojos.

07:50 AM.

Escaleras.
Las escaleras pueden ser engañosas para el sonámbulo inexperto, pero él ya conoce sus trucos y sortea los obstáculos sin problemas, o sin demasiados problemas al menos...como ser de rutina que es, su deambular se desarrolla con patrones básicos que nunca cambian, manteniendo su pequeño sistema en equilibrio, pero cuando cambian, este sistema se desmorona. También él se desmorona al cruzar sus pies con un extraño objeto en el ante último escalón, una especie de...bolso.
Una vez recuperado del golpe, se dedica a inspeccionar el contenido del bolso, ahora esparcido por el suelo; un espejo, un cuaderno, ¿¿crema de cacao?? ¿Qué es esto y a quién pertenece? Memoria en blanco, desesperación al no saber qué pasa, olor a café...¿olor a café? Eso es extraño, casi sobrenatural...es hora de averiguar qué pasa.

Cocina.
Ella está ahí, eso explica muchas cosas.


martes, 30 de octubre de 2012

La batalla del autorretrato.

Me dieron un espejo y me soltaron un "hoy toca autorretrato". Pregunté si al menos podían darme un lápiz y una goma, si es que no era mucho pedir...me miraron con una cara que no auspiciaba una buena respuesta, así que dejé escapar un "nada, no importa" y me levanté a buscar mis armas (cosa que resultó ser benéfica, porque de yapa me conseguí un sacapuntas).
                                                                                             

Tomé posición frente a la hostil hoja en blanco, con el lápiz en la diestra, mi mano semi-hábil, y la goma en la zurda, mi mano inútil; el sacapuntas esperaba en retaguardia. La tensión se cortaba con cuchillo, los nervios estaban a flor de piel, la sangre bullía; estaba claro que este, era un viaje solo de ida.

A mi señal, sonaron las trompetas, se desplegaron los estandartes (un raquítico león rampante, fiel demostración de mi escasa habilidad en combate) y a mi grito de "a la hoja mis valientes!!!" nos lanzamos a la carga, nos lanzamos a una batalla en la que las cartas no nos favorecían, pero con la clara determinación de que presentaríamos batalla.

La pelea fue desigual, hubo avances y retrocesos que se prolongaron durante toda la hora, pero al final mis tropas y yo nos impusimos al enemigo, logrando un Fran un tanto desproporcionado pero fiel al original.

martes, 16 de octubre de 2012

Blanca 2

Y quisiste vaciar tus ojos de expresión, tus mejillas de color. Cansada del mundo y sus prejuicios, decidiste volverte una más del montón.

Tenías miedo, te asustaba esa nada desconocida, porque en el fondo sabías que seguías siendo vos; la peli-azul de siempre, la de risa fácil y sincera, la que pintaba ojos para ver el mundo a su manera.

Pero eras demasiado especial para ellos, brillabas demasiado, así que decidieron tratar de apagarte, y mierda, que casi lo consiguen.

Pero no te dejaste; te diste cuenta del poder que te daba tu pelo azul y sonrisa fácil, de que tus ojos pintados también revelaban las verdades que siempre te quisieron ocultar; a pesar de todo, seguiste brillando con esa luz tuya.

Yo te lo agradezco.

miércoles, 10 de octubre de 2012

Buen viaje.

Un ligero ataque de melancolía. No es nada, ya se pasa.


Buen viaje hermanos míos. Están viajando desde hace mucho lo sé, pero hace poco me di cuenta lo mucho que ya recorrieron, y me entusiasmé con saber lo mucho que todavía han de viajar. Por eso les digo hoy, buen viaje; por eso les prometo hoy, acompañarlos a donde sea que decidan ir, cargar con su mochila cuando pese, o darles un poco de mi propio peso cuando se sientan muy livianos...ya sabemos cuanto les cuesta mantener los pies en esta tierra amada, y no seguir su cabeza a las nubes.

Buen viaje amada mía. Sé que viajamos juntos desde hace no mucho, pero hace poco me di cuenta lo hermoso que es el camino caminado a tu lado. Por eso nos digo hoy, buen viaje; por eso te prometo hoy acompañarte a donde sea que vayas, ser tu hombro, tu refugio cuando lo necesites; prometo  cantar junto a tu voz, por más que la mía sea ronca  y desafinada.

Buen viaje padres míos. Llevan viajando mucho tiempo como mis padres lo sé, pero hace un tiempo me di cuenta de que yo mismo no tendría viaje que recorrer si no fuera por ustedes. Por eso hoy les prometo seguir su voz de viajeros experimentados, prometo pedir direcciones cuando mi ruta no aparezca clara, prometo seguir caminando con ustedes si importar lo lejos que estén mis pies.

A todos, buen viaje. A todos, gracias por caminar conmigo y hacer mi camino único.

sábado, 29 de septiembre de 2012

Caminos y caminantes.


Te vi llegar por mi ventanita, estaba medio empañado y mojado por la lluvia, pero sé que te vi llegar y limpiarte las botas y tocar en la puerta del refugio. No sé si ya sabía que ibas a llegar, no sé si yo deseaba que llegaras, pero acá estás,  así que te pregunto el camino que te trajo hasta acá.

Me contaste de muchos caminos, cada uno tan interesante y posible como cualquiera. Pero hubo  especial, ese que me contaste mientras sorbías el segundo o el tercer café; ese camino en el que yo me reconocí como caminante. Y nos entendimos, pudimos describir el camino del otro, porque aunque sin saberlo, pudimos habernos cruzado una o dos veces, sin saberlo buscábamos lo mismo.

A la mañana nos acompañaba el bendito café, de hecho es el de anoche, te dije lo inútil que soy al medir cantidades. Sorbo, cara de asco, sonrisa, comentario, risas. ¿Vamos a la mesa? Tengo galletitas, ¿querés? Sorbo, cara de asco, -con un poco de azúcar se arregla sabés-, comentario, azúcar al café…mucha azúcar.

No sé, y sé que vos tampoco, hasta cuando nos vamos a quedar en esta pequeña pausa en nuestro caminar, pero la promesa de caminar juntos siempre está.

miércoles, 12 de septiembre de 2012

Los viajantes.

La luz la hacia brillar aún más, como resaltaba el naranja de su pelo, el verde de su vestido y el fuego en sus ojos.  Se vistió con una capa de determinación salió el mundo, con la mente fija de mirar solo hacia adelante, a enfrentar lo que el destino decidiera ponerle en sus pasos. Se prometió llegar a su destino, sin importar lo  lejano que estuviera o lo indeterminado que fuera. Se iría lejos, lejos de todo lo que la detuviera, lejos en el sentido lejano de la palabra.

No quiso que nadie preguntara dónde, con quién o cuándo volvería, así que se fue en medio de la noche, ese momento en el que los demás se abandonaban a la promesa de un mañana. Ella se había decidido a no esperar el amanecer, ella lo buscaría, se iba a encontrarlo, aunque tuviera que deshacer algún atardecer.
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Yo caminaba, tal vez un poco lento, tal vez divagando un poco...silbando alguna que otra canción que no me sabía, preguntando al camino qué tenía para ofrecer ese día. Ya no me acordaba de dónde me había ido, con quiénes había viajado, si es que había viajado con alguien, o para cuando había planeado mi regreso, si es que había planeado tal. Conociéndome, estoy casi seguro que todo empezó con alguna canción, de esas que uno escucha por primera vez, pero que de alguna manera nos hacen caminar, mientras la silbamos sin saberla.
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Se encontraron en algún punto del camino, que coincidió por obra de la casualidad, el destino, o el esfuerzo de ambos por encontrarse. Se preguntaron a de dónde se habían ido, con quién viajaban, si tenían pensado volver algún día.
Decidieron no acordarse, pero se dedicaron a pensar a dónde irían, se prometieron compañeros de viaje, y decidieron que tampoco querían volver de donde sea que hubieran llegado.

jueves, 16 de agosto de 2012

Una nueva función.

Hola, que bueno que volviste. Todos extrañábamos tus funciones...tu magia sigue intacta.
Para ser sincero, yo te esperaba mas que nadie, tu fan numero uno se queda chico al lado mío...raro no? Yo tampoco me lo esperaba, pero así me encontré un día, deseando tu magia como si fueran siglos sin verla. Acuerdo con el hecho de que el tiempo pase mas rápido en este mundo tuyo, pero es antideportivo hacerme extrañar tanto tu magia, simple dentro de todo. Pero es eso, la simpleza de tu magia, eso es lo que la hace tan especial...

En fin, gracias por volver.

martes, 31 de julio de 2012

Sentimiento lunesporlamañana.

Tal vez estábamos dormidos. O quizás medio despiertos, como ese sentimiento lunesporlamañana.
No sé. No supimos.

Pero siempre se despierta uno. Es bueno saberlo, porque nos da seguridad, ese algo a lo que agarrarnos. ¿Sentiste vos también que la noche se nos hizo larga? Nos despertamos al mismo tiempo.
¡¡Nos despertamos!! Ver el sol, el brillo de un día nuevo y prometedor. Verte a vos. ¡Nos despertamos!

Y qué bueno, porque el hecho de haber soñado tanto estando dormidos, nos va a llevar a hacerlos realidad. Sé que si. Buen día. Sé que fue un lento despertar, y tal vez perdimos uno o dos minutos de nuestra mañana...y bueno, me olvidé de cambiarle las pilas al reloj.

Sé que se nos puede haber hecho tarde, pero siempre tenemos mañana a la mañana para madrugar. En lo que a hoy respecta, buen día.

Blanca.

Siempre te imaginé blanca. No ese blanco desabrido, ni el muy brillante, sino ese blanco que tiene cosas para decir.

domingo, 29 de julio de 2012

Una caja de zapatos.

Miro una caja de zapatos. No tiene ABSOLUTAMENTE nada de especial, ni dibujos, ni colores ni nada.

Tal vez lo que llama la atención es lo extraño de la situación...una caja de zapatos en el medio del living. ¿No se supone que estén los zapatos en el medio del living, y la caja en algún "guardadero", o directamente tirada? Encima no sé si están los zapatos (la caja está cerrada) y no puedo recordar a qué par de zapatos corresponde dicha caja, porque ésta es tan caja como cualquier otra caja común y silvestre. 

¿Existen en realidad los zapatos? Uno tiende a asociar "caja de zapatos= hay zapatos", pero ¿cómo puedo saber si realmente están los dichos zapatos por solo ver la caja? Pasa el tiempo y decido que no puedo confiar solamente en la visión de la caja, y acaricio la idea de levantarme del cómodo sofá para resolver de una vez este misterio, pero una vocecita en mi oreja izquierda que me pregunta -con tono sugerente de propaganda de shampoo- si de verdad quiero abrir la caja...¿de verdad quiero resolver el misterio? 

 Y la voz sigue diciendo ¿Y si en vez de zapatos, esta humilde cajita contuviera en su interior algo que sólo podrá ver si se le revela en el momento adecuado? (Si fuera así, obviamente abriría la caja antes del momento (de curioso incurable que soy, con una severa intolerancia a la intriga) vería algo que no entendería, pero que por alguna razón me causaría una extrema fascinación, la cual sería incomprendida/patologizada/investigada/medicalizada por los demás, lo que automáticamente me convertiría en un loco más del montón hasta que eventualmente encuentre a alguien/es que si me entiendan y pasemos a ser "Yo-->Ellos" los locos, pero de "nuestro" montón. Más tarde, el mundo de la ciencia descubriría "algo"  que por alguna extraña razón nos hará gradualmente menos locos, ya que más y más gente comenzará a sentir un  extracto con añadidos de vitamina C de aquélla fascinación inicial, milles de millares creerían entendernos y los locos del montón serían Ellos-los-otros-en-su-montón-sin-extracto-de-fascinación-con-añadidos-de-vitamina-c (abro un paréntesis para preguntar si entienden mi película...si? Buenísimo sigamos) Y la fascinación se vendería en botellitas coloridas. Pero yo no quiero esa película, ¿entonces por qué este paréntesis infinito?) Y la vocecita triunfó, no abro la caja, y respiro aliviado porque toda la "película-paréntesis" jamás verá la luz. Pero yo tampoco voy a ver si los putos zapatos están en la caja o no.

sábado, 21 de julio de 2012

Exhibición incompleta.

Fue todo un lento transcurrir. Uno a uno fue sacando sus sueños, lentamente y con parsimonia. Sacaba uno, le pasaba un trapo húmedo y lo apoyaba sobre la colcha.
Sacaba otro.
Y después otro.
Y otro...
Todos sobre la gruesa colcha de recortes de tela naranja, los observó, los admiró. Y se acordó que gran soñador era, bien podría exhibir sus sueños como sus trofeos. Hasta tenía pensada la lujosa vitrina, con molduras doradas y estantes de madera pulida hasta lo imposible, y allí sobre los estantes, sus sueños, iluminados con unos tenues chorros de luz que vengan de aquí y de allá. Sería perfecto.

Pero se acordó -más tarde de lo que hubiera querido- de porqué sus sueños estaban en su cabeza y no en una vitrina. Se acordó de una persona que alguna vez dijo que la mejor manera de exhibir un sueño era con una acción que completara el cuadro. Pero argumentó, y siguió argumentando, que no exhibía sus soñados trofeos porque no cabía en su casa una vitrina tan grande.


Y guardó uno.
Y después otro.
Y otro...



viernes, 13 de julio de 2012

Un para-rayos en el pasillo 3

Está sonando Show Me How To Live  de Audioslave.

Nunca me puse a pensar muy seriamente en cómo estaba guiando mi vida. Siempre tuve presente que vivía acorde a mis convicciones, anhelos, deseos y guías que me iban tirando mis viejos, pero nunca me senté y me pregunté "Cómo estoy viviendo? Lo hago bien?" En parte porque no me importa un comino, y en otra parte porque en serio no sabría cómo responderme. Pero intentemos.

¿Cómo estoy viviendo? Bien, creo que bien. Siempre pienso antes de actuar, a veces demasiado. Siempre tengo en cuenta que hay otros con los que comparto mi vida y acciones, por ende no ando pensando solamente en mi ombligo. Pero aún así hay gente que parece disconforme conmigo, o dicen que no doy todo o que doy de más...y yo digo, no hay MIERDA que les venga bien. Y vuelvo a decir, si sos tan gigante como para decir lo mal que vivo, show me how to live. ¿Ah viste? Qué difícil es dar el ejemplo. 

Respecto a si lo hago bien o no... show me how to live

domingo, 24 de junio de 2012

A quien corresponda.

A quien corresponda informo que he de empezar a caminar, he de dejar esta carcasa y de una vez por todas salir a respirar.
A quien corresponda advierto, no has de cruzarte en mi camino, ya esperé demasiado.
A quien corresponda grito, se van todos por donde vinieron, ya nada quiero de ustedes, sos voces ya son polillas en mi cerebro. No quiero verlos.

A vos, te aviso, ya voy, esperáme.
Señales de humo, susurro de viento, lo que sea para hacerte llegar este mensaje. Ya empecé a caminar, en algún momento llegaré donde te prometí. No sé cuando, pero espero, sea dentro de poco.

Gris.

lunes, 30 de abril de 2012

Cuatroycuarentaynueveaeme

Si el reloj pudiera seguir su curso en mi cabeza. Si esas malditas voces que no dicen nada se callaran de una vez la boca. Si pudiera ver lo pasado y venidero con mente fría.
¿Entonces existiría un tal vez? Tal vez.

Si tuviese los ojos en el lugar correcto. Si pudiera leerte como a Cortázar o a Bodoc. Si me dieses las señales que el vientito de casa me da...¿entonces sería diferente? No hay tal vez en el ser, se es o no.
Tal vez es sí, tal vez es no, pero no es "tal vez tal vez". No existe tal cosa.

Tal vez ni hace falta existir o ser, tal vez es suficiente transcurrir, y al mismo tiempo tratar de existir como seres que somos...o no.

Mariposas negro-amarillas.

¿La guitarra pinta el sonido, o el sonido pinta la guitarra? La duda crece a medida que miles de mariposas negro-amarillas se me vuelan de las manos sureñas. ¿Volverán algún día? Mis mariposas negro-amarillas se fueron volando en Fa bemol.

Que "shhh", que silencio, que las mariposas siguen volando dormidas, o descansan sobre el mástil de una guitarra a medio afinar, medio tirando a un piano.

Que "shhh", que silencio, que mis mariposas volaron de mis manos sureñas pa' encontrar luz de luna negro-amarilla, que es tan luz como la de sus alas, tan luz como cualquiera.

Una alegre confusión.

Una alegre confusión, rara dentro de todo.
Quizás accidental, quizás buscada, real dentro de todo.

Clasificaciones sin importancia, porque solo estando más allá de todo, más allá de lo raro o de lo real, uno es capas de apreciar algo. Algo como un dibujo complementado, cigarrillos y silencio. Algo como un diálogo titubeante, risas y algún canto.

Igualmente, dentro y más allá de todo, más allá de lo raro o lo real, de lo simple o complicado, es una alegre confusión.

jueves, 19 de abril de 2012

Se levanta abril

Se levanta abril,
con hojas caídas y gente,
que se aferra a lo intangible para no caer.

Se levanta abril,
con viento fresco y gente,
que se aferra a lo etéreo para no volar.

Se levanta abril,
con lluvia y gente,
que se aferra a sus firmezas para no hundirse.

Y se levanta abril, tu abril, mi abril,
con hojas, viento fresco y lluvia,
y gente que a nada se aferra a nada porque no existe.

Y nosotros, transformados en intangibles firmezas, en caídas etéreas y hundidos volares
nos aferramos a las hojas caídas,
al viento fresco,
a la lluvia,
para no ser como la gente muerta en este otoño.

sábado, 25 de febrero de 2012

Yo que sé.

Yo que sé...a veces es como estar atrapado entre la espada y la pared. Otras veces es un paraíso.
Es indescriptible, insoldable, inimaginable y muchas más. Quizás demasiadas. Yo qué sé...por lo general me sale bien esto de escribirle al aire, pero vos no sos aire, ese es el problema.
Citando al maestro "ser o no ser? He ahí la cuestión", el sentimiento es igual de indescriptible.
La duda. la mano que nos dibuja parece trabarse por momentos, que para ella serán segundos, pero para nosotros, simples criaturas pueden ser años. ¿Te imaginás? ¿AÑOS de duda? Años de escaparse de un fuego que todo lo consume y que deja espacios vacíos en una hoja medio-pintada-medio-en-blanco. Y es cuando se encuentran esos espacios, que la mano se detiene. ¿Cómo volver a llenar algo que ya estuvo lleno antes? ¿Cómo hacer para llenarlo con lo que desapareció? Duda, tristemente sin respuesta. Bah, aún. ¿No?

jueves, 16 de febrero de 2012

El lápiz sobre la realidad.

Y el lápiz se levantó de su silla y empezó a dibujar.
Trazos finos, inseguros al principio. Duda ante la magnitud del blanco vacío. ¿Vale la pena siquiera intentar hacer algo? ¿dejar una marca? Indeciso, comienza...
Y se dibujan cielos, mares de arena brillante, tierra mojada y sonrisas en los rostros ayer tristes como los llantos nunca escuchados. Los sueños van apareciendo, de a poco, aún titubeantes...con miedo a que resulten ser no más que un mero capricho del soñador ingenuo.
Pero el lápiz sigue trazando líneas, llenando con simpleza el gran vacío. Se rehúsa a dejarse matar, mientras quede grafito quedarán sueños por trazar.

Sueño. Sueño y trazo. Trazo mis sueños.


Pero yo escribo.

Sueño. Sueño y escribo. Escribo mis sueños.
Sueño y te sueño. Escribo y te escribo.
Te escribo sobre un papel, en la mesa del café o sobre el maldito gráfico del libro de matemática.

Y mientras esta ciudad se nubla, el lápiz, MI lápiz sigue escribiendo e intentando dibujar. Porque mientras me quede grafito y alma que seguir alimentando, voy a seguir soñando despierto. Te voy a seguir soñando.


domingo, 12 de febrero de 2012

Un paso muy grande que se da demasiado rápido.

Una lluvia se hace tenue, como una cortina de luz.
La noche amanece, y el delicioso caos que anticipa la calma se siente.
Todo vibra, todo respira. Morimos y vivimos a cada parpadeo.

Todo está en equilibrio. Delicadísimo equilibrio.

Calma y luego caos. Un paso muy grande que se da demasiado rápido, quizá sin pensar en lo que puede venir corremos. Es simple en realidad, más simple de lo que muchos piensan. En un momento estás dentro de ese ambiente donde todo transcurre y no hay necesidad de preocuparse por saber hacia dónde van las cosas...y al segundo siguiente, a la siguiente decisión, estás envuelto en ese mar de ires y venires, donde todo se dio vuelta, donde todo está al revés de como debería estar...y no hay tiempo como para preocuparse en poner las cosas en orden. Ni tiempo ni posibilidad, porque vos dejaste de ser vos, porque (y aunque pienses diferente) vos también te diste vuelta con todo lo demás. Entonces te preguntás cómo es eso posible, estabas tan seguro de vos mismo.

Volver a la calma cuesta, pero se vuelve, te juro que se vuelve. Cómo vuelvas, depende de vos.

jueves, 9 de febrero de 2012

Lluvia de hojas y agua.

¿Si fue mi locura el motivo?, no lo sé.
¿Fue mi acento? Tal vez hablaba en un idioma desconocido.
Tal vez fue por como tocaba el piano en aquél bar en esa calle oscura,
 en esa noche fría de noviembre. Fue extraño, tu primavera era mi otoño.
Y es así, porque las historias tristes quedan mejor con la caída de las hojas.
¿Era una historia triste? Tenía que ser, porque también llovía a cántaros.
La historia era una de esas típicas en las que la gente se despide, y las lágrimas se confunden con la lluvia fría de otoño, esa que cala hasta los huesos. Una de esas historias en las que hay alguien que el que se queda y se ahoga en un licor de mala calidad y olor. En las que hay alguien que se va, al ritmo de un piano triste, hasta alguna estación de ómnibus, o en su defecto de trenes. Lo curioso es que el que se va, se va solo y con su alma, pareciera que los boletos son gratis.

O tal vez no era una historia triste, y la escenografía me engañaba, o ese misterioso licor que olía mal.

Quizás, entre el sueño y la mentira de la realidad, la historia era una de esas donde la gente se encuentra,
en bares olvidados, en calles oscuras, en noches frías de primavera u otoño, casi por una casualidad.
Y las lágrimas se confunden con la lluvia de primavera, esa que te moja íntegro, pero que no te congela. Una de esas historias en las que hay alguien que se encuentra con otro alguien después de una eternidad y una realidad de por medio. El las que una guitarra canta sus alegrías, cuando esos dos alguien se encuentran en una estación de ómnibus, o en su defecto de trenes. Lo curioso es que el que llega, llega solo y con su alma, pareciera que los boletos son gratis.

¿Si es mi locura lo que me hace escribir esto?, no lo sé...espero que si.

sábado, 4 de febrero de 2012

Te dedico un poema, y sus vueltas.

-Te dedico un poema- Dice una voz, tal vez soñando el mañana. 
¿Soñaba? Tenía que ser, la realidad hubiera tenido una lluvia por la tarde y un café en la vereda.
Además, había algo que no encajaba en todo esto...la música de fondo, no era la correcta. Debería estar sonando un Jazz de los tristes, no esa irritante música de ascensor. 

-No necesito un poema ahora- Dice otra voz. -Pero es un poema de los lindos- replica la primer voz, y empieza a recitar. 
El donde-sea en el que se encontraran se transforma en poema, venido desde las mismas raíces de nuestro poeta-soñador, y el poema brota y sigue brotando...

Ya habrá un juzgado que dictamine si fue pasional, negligente, alevoso o premeditado.

La segunda voz está muda. La primera sigue desarmándose en versos y más versos. 
El cuarto pasa de ser un campo de flores, a ser una calle del centro de un pueblito remoto, a ser la orilla del mar en la noche del 31, a ser una noche sin luna ni estrellas.
La realidad pasa a ser el sueño, pasa a ser lo imposible. La realidad perdió su lugar.

-No necesito un poema ahora- repite la segunda voz, y se aleja.

-Pero es uno de los lindos- repite la primer voz, apoyada contra el marco de la puerta.
Y reaparece el café, la lluvia y el Jazz triste.

miércoles, 1 de febrero de 2012

Sinsentidos y un poco de sentido.

Se me está haciendo costumbre esto de escribir un par de líneas antes de escribir la idea en sí.
Se me ocurre que tal vez algún día pueda poner algo interesante entre estas líneas.

Hoy pensaba, o mejor dicho, Gris pensaba, en la cantidad de sinsentidos que invaden nuestra vida. Cosas que la verdad ni valen la pena siquiera pensarlas. La verdad que si uno se pone a pensar ve claramente todos esos puntos totalmente (y argentinizando) al pedo. 
Mi pelea con aquél amigo que nunca volví a ver. El resentimiento entre familiares de una familia desconocida (seguro hay, siempre hay) y esa larga lista de cosas que hacen nuestra vida un poco más negra y pesada a cada instante. Y para hacer las cosas mejores, tenemos los miedos, las frustraciones, las mentiras, celos, desengaños, y una lista aún más grande de porquerías diarias.

Y como te quiero hacer sentir peor aún, te digo que esas cosas son imposibles, im-po-si-bles, de erradicar de tu vida. Simplemente forman parte de ella.

Pero, ¿cuántas caras tiene una moneda? ¿Y la vida? La vida es en la práctica, una moneda, porque tiene dos caras. Y así como tiene la parte negra, esa que con tanto placer Gris te comentó, tiene esa parte que hace que lo pesado no lo sea tanto, esa parte que hace que haya una pizca de sentido en esta vida larga y jodida. Pensando me dí cuenta de que lo simple, lo cotidiano, nos da las alas y la ligereza para soportar la vida en sí. El brillo del sol, las amistades y la risa por ejemplo. La brisa atrapada en un misterioso vestido rojo. La lluvia. 
Esas son cosas que de por sí, solas hacen mucho, pero combinadas...es increíble lo que puede hacer una sonrisa tuya, o las gotas de lluvia al viento. 

Sobre qué cara caerá una moneda arrojada al aire es algo totalmente aleatorio, depende de cómo rebote, sobre qué rebote, etcétera. Por el contrario, la vida, se puede predecir de qué lado va a caer, en base a lo que uno elija ver y vivir. Se imaginarán como es la fórmula; si elijo creerme que la vida es la porquería que me pintan, el lado que va a quedar visible es ese, el de la negrura absoluta, el del gran sinsentido. Pero, si logro tomar y hacer mías esas cosas simples y cotidianas que hacen de la vida algo más tolerable (y hasta incluso disfrutable) voy a poder ver la cara oculta de la vida (cualquier coincidencia con Pink Floyd es pura causalidad), la cara que logra combinar de forma exitosa ese sinsentido que existe (que no podemos negar que está) con pequeñas cosas que a su vez le aportan sentido y valor a esta vida. 

¿Este blog fue un poco raro no?  Yo la verdad es que no lo pensé así, pero no sé...simplemente fue saliendo en base a lo que pensé hoy. 
Esta entrada es especial, ¡¡es la Nº 100 de mi blog!! Y como habla precisamente sobre el sentido y el sinsentido, sobre encontrar el sentido...me parece que en mi caso esta entrada me sirve a mi para reafirmar que una de las cosas que le da sentido a mi vida (desde el 2010 hasta el presente) es escribir. Me sirve para decir que esto que estoy haciendo precisamente ahora me hace la vida un poquito más ligera.

Y, como es una ocasión especial, la aprovecho para agradecer a tooooooodas esas personas que me dan la alegría de pasarse por este blog y leerme. La verdad que se los agradezco muchísimo la aceptación y espero seguir y no defraudarlos. 

Paz.










sábado, 28 de enero de 2012

Entremundos

Tal vez soñar la realidad sea la salida. Tal vez una realidad soñada no lo sea. Una de dos o ninguna.
Pero si es ninguna, ¿qué es entonces? Una delgada capa de sueño sobre una capa igual de delgada de realidad. La línea que las separa puede llegar a ser tan fina, fácilmente se desdibuja. Es entonces, en el que la vida se vuelve tolerable, hasta incluso disfrutable. Es en ese "entremundos" en el que nos encontramos, hablamos, amamos y odiamos. En ese lugar y en ese momento, podemos ser y hacer lo que se nos antoje.

Espacio sin espacio, tiempo sin tiempo.
Logramos despegarnos del suelo y del minutero, y vivimos.
Vivimos y descubrimos. Descubrimos y vivimos con más gusto todavía.


martes, 24 de enero de 2012

Ver el mundo a través de otros ojos
te ayuda a entender al mundo,
no a los otros.

Gris.

Ellos me sacan de quicio. Simplemente no hay forma en que pueda estar cerca y no sentir ese impulso asesino. No voy a negar, que varias veces consideré lastimarlos, lastimarlos y que sufran un poco. ¿Venganza? No nada de eso. De hecho, es mucho más simple que la venganza, simplemente los odio. 

Parece raro, un odio tan poco fundamentado, tan poco explicado, ¿se necesita en realidad? No tengo que dar explicación ni fundamento alguno, el odio, igual que el amor, no los necesita. Parece raro, y tal vez lo sea...pero ¿a quién le importa? ¿Acaso es ilegal odiar? Sea lo que sea, ellos lo merecen.

Ellos no me conocen, no se molestan en siquiera intentarlo, mejor así. Me basta con conocerlos yo a ellos.

No necesito más.


domingo, 22 de enero de 2012

Sombras chinescas en tu paraíso

Corriste. Corriste y te escondiste.
Buscaste otra historia dentro de una canción diferente. Quizás algo tuyo estaba perdido ahí, en ese cuartito donde te dormiste a esperar. 
¿Por qué corriste? ¿Miedo tal vez? O tal vez era aire lo que necesitabas. Sentir el aire en tu cara al correr.
Es curioso. Eso, tu permanente necesidad de aire, tu continua búsqueda de libertad. Tu paraíso.
Cierro los ojos y te imagino, o por lo menos trato de imaginarte. Pero llueve, y el vidrio parece derretirse, y con él tu imagen. Me recuerda a aquella vez, también llovía ¿te acordás? Salir, hablarte y enloquecer. Pero mi locura y tu irrealidad no impidieron que robáramos las estrellas del cielo vecino, o que jugáramos a las sombras chinas en la cortina. Estabas tan hermosamente abstracta, un estallido vibrante de colores, negándote a cualquier tipo de olvido.

Y lo lograste, porque aún cuando la música hubo terminado, seguías vibrando en aquél cuartito de cortinas blancas y almidonadas, donde habitaron palomas de sombra, donde hubieron carreras en busca de una canción diferente, de aire fresco y nuevo. ¿Tu paraíso?

domingo, 15 de enero de 2012

Una lágrima en una cascada de por acá.

El sol asoma entre las nubes, al ritmo de una melodía que ni yo se pero quiero escuchar.
Tal vez es otra utopía, tal vez es real. Tal vez, tal vez ni una ni la otra.
Y aún así, ante la mortal duda, no hay llantos ni dolores ni remedios.
Tan solo esa sensación de mar, esa sensación de hermosa duda. Todo es muy simple y muy complejo a la vez, todo es tan deliciosamente humano.
Miles y miles de cosas hay. Miles y miles hubo antes del punto final, y otras miles habrá en la siguiente oración.
Es hermoso saberme transitorio, saber que no duraré más que una lágrima derramada en alguna cascada de por acá. Pero a la vez, saber que soy parte de algo más grande, no tiene precio. La deliciosa paradoja humana.
De pronto, hay viento, ¿o es el tiempo? La realidad, la ilusión, la utopía. Todo va acabando de a poco.
El amanecer se hace noche al ritmo de la misma melodía desconocida. Y todo sigue siendo como el mar, todo sigue siendo muy humano.


sábado, 14 de enero de 2012

Efímero

Lo efímero. Lo humano.
Arena al viento. Ese dulce y suave despertar.
La ola rompiendo.
Tu beso. Vos.
En un segundo se va la vida. No te duermas amor.
Que el segundo no está acá para quedarse.
Ese reloj no se calla.
La arena sigue y seguirá corriendo.
Desenfrenada. Vos.