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sábado, 25 de febrero de 2012

Yo que sé.

Yo que sé...a veces es como estar atrapado entre la espada y la pared. Otras veces es un paraíso.
Es indescriptible, insoldable, inimaginable y muchas más. Quizás demasiadas. Yo qué sé...por lo general me sale bien esto de escribirle al aire, pero vos no sos aire, ese es el problema.
Citando al maestro "ser o no ser? He ahí la cuestión", el sentimiento es igual de indescriptible.
La duda. la mano que nos dibuja parece trabarse por momentos, que para ella serán segundos, pero para nosotros, simples criaturas pueden ser años. ¿Te imaginás? ¿AÑOS de duda? Años de escaparse de un fuego que todo lo consume y que deja espacios vacíos en una hoja medio-pintada-medio-en-blanco. Y es cuando se encuentran esos espacios, que la mano se detiene. ¿Cómo volver a llenar algo que ya estuvo lleno antes? ¿Cómo hacer para llenarlo con lo que desapareció? Duda, tristemente sin respuesta. Bah, aún. ¿No?

1 comentario:

  1. Quizás esos espacios en blanco sean regalos que nos da la vida para dibujarlos y llenarlos como queramos; y esos espacios llenos que debemos volver a llevar tal vez sean oportunidades de reformular lo ya hecho y pintar con nuevos y más lindos colores.

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